Un día como cualquier otro

-Te causo problemas...yo no quiero herirte...-sollocé y le abracé con fuerza.-Lo siento de veras...

- Tranquila, yo soy fuerte, puedo superar que mas hombres anden detras de mi novia, porque no es raro y además se que tú me amas a mi asi que no me va a quitra el sueño nada, porque confio plenamente en ti -le dije dandole un beso en al cabeza mientras la abrazaba con fuerza- y nunca pienses que me causas un problema porque eso nunca sera cierto.

No podía evitar pensar que en Lex no existía algún rastro posible de maldad,era bondadoso y comprensivo...simplemente era perfecto...y le quería de tal forma...la culpabilidad no desapareció...
-Gracias...

- Estate tranquila, no tienes ninguna culpa, es mas yo creo que deberias hablar con él, quizas se alla confundido en algo que le dijiste o en alguna de tus acciones, no te preocupes -intentaba tranquilizarla no quería que se pusiera mal, ella era muy buena y quizas alguan de sus acciones o gestos habia hecho crecer en el alguna esperanza-.

Sonreí y me acerqué para besarle en los labios.
<<Desde ahora y para siempre>>
-Te prometo que te amo.

- Y yo a ti tambien mi pequeña -dije juntando mis labios con los suyos- mas de lo que cualquiera podría pensar, y ahora no estes triste todo se va a solucionar, te prometo que nada malo va a pasar y que no me pienso alejar de ti jamás -le sonreí con dulzura y le di otro peqeeño beso estrechandola contra mi-.

Y asi nos quedamos durante un buen rato abrazados, mientras escuchaba los suaves lastidos de su corazón...

Estuvimos un buen rato en silencio acompañados por la respiración del otro.

- Mejor vete a descansar, y no te preocupes por anda -le dije dandole un beso en los labios- yo tengo que ir a hacer unas cosas, cualquier problema me llamas... te amo -dije para luego marcharme aunque antes pararndome a observar que se encontraba bien-.

-Claro.-sonreí forzosamente, y tras un buen rato después de su marcha yo también me marché.