Mi llegada

Sonreí.
-Que suerte, así que tienes 18 años, yo vine aquí por voluntad propia, tuve que tener el permiso de mis padres, porque solo tengo 16 años...en realidad convencí a mis padres mintiendoles...no saben lo que se hacer, no saben que soy un mutante. Ni siquiera se porque lo soy.-dije.

-Yo vine por voluntad propia... me escapé de casa hace un tiemo y nadie sabe sobre mis poderes.-dije con seriedad.

-Yo tampoco lo sé-
¿No iba a llegar ningún profesor a recibirnos? ¿O para señalarnos nuestra habitación?

-Siempre me he preguntado como yo puedo tener esta habilidad, pero me gusta...-sonreí y mi pelo volvió a la normalidad.-Es una suerte haber encontrado esta academia, creo que nos darán muchas respuestas.

-Eso espero, aquí estaremos mucho mejor que en cualquier sitio... para mí sí-dije mirándolas y sin mostrar ninguna expresión más que mi rostro serio habitual.

-Aquí por lo menos no seremos raras, ni nada de eso, y no tendremos que esconder nuestras habilidades..-dije y mi pelo tomo su color castaño habitual.-Por fin.

-Ya...eso es verdad.-dije-¿Creeis que vendrá mucha gente aquí?
Mis ojos volvieron a su tono azulado.

-Somos mutantes, muchos no debe de haber, pero sí unos cuantos-
Suspiré, no me apetecía hablar. Pero seguía sin aparecer algún profesor.

-Bueno, no podemos saber si hay muchos o pocos, la mayoría esconden sus habilidades por miedo al rechazo de los demás, y si no, simplemente se esconden.-dije.

-Te doy toda la razón,Arianne.-dije.
En esta escuela esperaba aprender a controlar y mejorar mis poderes,hacer amigos que me comprendieran y a los que no tener que esconder nada,también esperaba encontrar a alguien que me quiera tal y como soy....

-La verdad... es que aquí nadie tiene que sentirse mal o esconderse sólo por ser una persona especial... para mí es eso-dije mirándolas.

-Aquí ya no somos raras-dije.
Me di la vuelta y me senté contra la pared. Volví a sacar la libreta de la mochila y seguí dibujando.
Tras el movimiento de mi lápiz poco a poco aparecieron las ramas de un árbol, cayendo hacia el suelo, y el movimiento del árbol contra le viento.

Miré a Emma y ví como sacaba su cuaderno y se ponía a dibujar.
-¿Es qué te aburrimos?-dije sin animo de ofender.

Miré a la chica dibujar parecía muy relajada.
-Bueno... encantada de conoceros, me voy-dije despidiéndome con la mano y caminando hacia la entrada de la escuela.

-Adiós.-dije.
La despedí con un movimienti de cabeza.

Le despedí con la mano y dije:
-Hasta la próxima...esto...-quería decir su nombre, pero no sabía cual era.-Hasta otra.-me decidí a decir.

-Bueno...ahora¿que hacemos?-dije.
Esperé su respuesta

Le miré confusa.
-No lo sé...-dije.-Acabamos de llegar...¿deberíamos esperar a alguein?, aún no sé cual es mi habitación...

-Yo tampoco lo sé...bueno voy a investigar por la escuela un poco...adiós-dije
Cogí mis cosas y salí al jardín para investigar.

-S-suerte...puede ser interesante vivir aquí...aunque aún tendré que adactarme...-dije con suavidad, aunque aún tenía que hacer amigos...o al menos intentarlo.

-Yo también me voy.-dije por si la otra chica me escuchaba, cogí mis cosas y me fuí de allí.