nadando

No hacia mucho tiempo que estaba en esa academia, deambulaba por los pasillos como si fuera un fantasma buscando una idea que llegase a mi mente, pero solo se me ocurrian cosas sin sentido, caminando llegue hasta lo que se parecía la piscina.... quizas fuese un buen lugar.
Entre en la piscina casi arrastrando los pies, cuando llegue observe una silueta nadando... al parecer una chica.

vi acercarse a una chica en la piscina me acerque al muro y la salude. - hola.

- Hola -le dije devolviendole el saludo y sentandome en una silla que habái allí, acababa de entrar y no pensaba irme aún-.

- me llamo Claire lodge ¿y tu?, dije sonriendo

- Eric Ludwig -le repondi son una diminuta sonrisa, aun estaba algo concentrado en mis pensamientos-.

- ¿ de donde eres? , dije sonriendo

- Naci en San Francisco... ¿tú? -pregunte mirando para la cristalina agua-.

en florida, dije mientras me sentaba en le bordillo.

- Nunca he estado allí, auqneu debe ser un buen lugar para vivir -dije pensativo imaginandomelo, desde hacia algunas horas estaba bastante pensativo-.

- si lo es, aunque san Francisco debe de ser maravilloso, dije riéndome

- Si, aunque no es nada del otro mundo -le respondi a mi me parecía una ciudad corriente-.

- ¿ que edad tienes?, dije mirándolo parecía joven

- 17 años -le respondi mirandola- ¿tú?

18,un año mas vieja, me reí

- Te conservas bien para ser vieja -le dije mirandola-.

gracias, dije riéndome. - ¿ hace mucho que estas por la academia?

- No, solo unas pocas horas, estuve explorando un poco, es un lugar grande.
"Una excelente prisión" pensé intentando que mi expresión no cambiara.

- bueno yo la verdad que tampoco hace mucho que llevo aquí, pero bueno, -¿cual es tu poder?

- Puedo cargar un objeto con energía y cuando lo tiro explota -mencione con orgullo, no me avergonzaba en absoluto de mi poder y los actos que hacia con el-.

- es genial, , me gusta, dije riéndome

- ¿Tú que haces? -le pregunte serio y curioso-.

- leer la mente de los demás, dije riéndome.

- Es un poder... interesante. -dije pensativo, ya me habían habaldo de ese poder, me llamaba la atención-.

- ¿ya conoces a mucha gente por aquí?, dije mirándolo