Baile

-A mi me encantaría casarme, quiero saber si es tan malo o tan bueno como dicen.-reí.-Me gustaría saber si hay alguien por ahí esperándome.

- ¿Feliz? Yo estoy muy feliz -dije riendo- pensaba que esto iba a ser mas aburrido, pero por suerte me equivocaba -le sonrei a Ciro-.

-Me alegra oirte decir eso.-dije.

- A mi tambien me alegra -bromee, mientra seguiamos bailando - ¿en que piensas? -pregunte curiosa mirandole a los ojos

Sonreí.
-Estoy cansada, me voy a mi habitación. Siento no quedarme más, pero estoy agotada.

-Esta bien, nos vemos.-sonreí.-Descansa.-dije y me aparté de ella, haciéndome a un lado.

-Adiós, y haber si llega tu pareja pronto. Y ya sabes, si necesitas algo, sólo búscame-levanté un poco mi vestido para no tropezarme y salí de allí.

-Claro.-sonreí y me despedí con un gesto de mano, luego volví junto a la puerta, solo de nuevo y me apoyé contra la pared, pensando que la noche no había estado tan mal, aunque extrañado por la falta de mi pareja.

Le sonrei cuando dijo eso y le di un pequeño beso en los labios.
- ¿Nervioso? Yo no muerdo, creo que tú eres mas peligroso que yo, -bromee aun sonriendo-.

Rei
- Como quieras, a mi me da absolutamente igual -dije- por cierto, gracias, me he divertido mucho contigo -le di un corto beso en sus labios y sonrei-.

Coloqué mi mano tras su oreja y la volví a besar.
-Buenas noches.-Dije.

Le devolvi el beso y luego sonrei respondiendo a su despedida, y asi irme a dormir, ya me dolian los pies de estar de pie.